DÍA 5
Nos levantamos temprano a desayunar y ver con tranquilidad el parque José Martí, hacer unas lindas fotos y luego fuimos a conocer el Hotel Unión ya que planeábamos pasar la tarde en la piscina del hotel, que es muy bonito de estilo colonial y realmente se mantiene muy bien, también tiene una terraza que en las noches podés ir a beber algo y suele haber shows, también es posible desayunar, todo sin alojarte. Aunque a un ritmo pausado, recorrer agota. Las tardes son muy calurosas, más cargando con las cosas de la bebé, cámaras etc. Entonces era un día para estar tranquilos y relajar un poco.
Volvimos al alojamiento y mi Doc, nos esperaba con algunos regalos, sobre todo un chupete para la bebé que lo habíamos perdido el día anterior en nuestro paseo por el malecón, realmente me pareció un gesto muy bonito de su parte, también trajo una mamadera para el agua, unas binchas y otras cositas para nosotros. La verdad no era necesario, pero se agradeció el gesto y el chupete es su favorito hasta hoy. Pequeños detalles que son muy apreciados y valorados, que no siempre las personas ven.
Intentamos nuevamente conseguir una sim de celular de etecsa, fuimos camino a otro local que estaba más alejado en el que en teoría tenían. Cuando llegamos estaba cerrado porque se había ido la luz. Así son las cosas, si salen bien y sino, pues otro día será, no vale estresarse. Aprovechamos que estábamos cerca del malecón y nos acercamos a disfrutar del horizonte y su inmensidad e hicimos algunas fotos para registrar ese momento construido, daban ganas de quedarse horas, pero ya teníamos planes.









Sin más preámbulo, nos preparamos y fuimos a disfrutar la tarde a la piscina del Hotel La Unión, como comenté pagamos una pequeña suma e incluía una consumición. Pedimos Cuba libre, unos Mojitos y Piña Colada, Estos tragos en cuba son súper ricos y bien preparados en general. Mientras las chicas disfrutaban la piscina yo disfrutaba de los tragos y cuidaba la bebé, es duro el trabajo de padre jaja. El clima empezó a amenazar con lluvia, así nos refiguramos bajo el techito del bar del hotel, aprovechamos para pedir un cafecito y la lluvia se hizo presente con toda su intensidad tropical, tanto así que la temperatura bajo al instante, eso no nos ahuyento y nos quedamos disfrutando la tarde.








Volvimos al alojamiento a cenar y después salimos a recorrer un poco la ciudad ya con la noche cayendo y pasar por el prado nocturno. Ya volviendo en medio de un nuevo apagón en la ciudad o viejo según como lo vean porque ya es la rutina, nos pasó algo súper raro. Escuchamos un sonido intenso, muy fuerte, como eléctrico, pero más como explosión, el cielo se volvió verde en medio de la oscuridad, no fue un relámpago para nada, la verdad nos asustó un poco, dijimos los extraterrestres llegaron a abducirnos, no entendíamos nada. Por suerte estábamos cerca del alojamiento así que volvimos. Allí tampoco sabían que pasó, subimos a la terraza y nuevamente el mismo fenómeno, se sintió bastante cerca, así que bajamos y luego una vez más. De pronto en medio del apagón aparecieron unos vehículos policiales que cortaron la circulación, recuerden que estábamos a la vuelta de la casa de gobierno. Al instante empieza a circular por internet lo que supuestamente había pasado, resulta que algunas personas a modo de protesta, cansados de los apagones tan largos, lanzaron unas cadenas cerca de unos transformadores eléctricos medio antiguos, eso generaba un cortocircuito y su estallido que es lo que producía esa luz verde intensa en el cielo. La verdad súper extraño y si bien no me sumo mayor preocupación, si me pareció súper raro y me dejo ver en primera persona, lo tensa que esta la situación o lo agotadora que es la vida en la isla. Situación que no pasa a mayores porque la gente está indefensa, no tienen ya la energía necesaria para salir a las calles, hay miedo a la represión y a ser arrestados por protestar, aunque la presión tan grande que cargan en sus hombros generan estas cosas y quién sabe cuánto más resistan así. “Es un monstro grande y pisa fuerte toda la pobre inocencia de la gente, Desahuciado está el que tiene que marchar a vivir una cultura diferente” cantaba Mercedes Sosa esta canción escrita por Gieco.
Así con estas reflexiones pasaba otra noche en Cuba.